ARCHIVO DEL DUELO


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En los últimos años se ha hecho corriente que después de un atentado terrorista los ciudadanos depositen objetos junto al lugar del crimen, ya sean peluches, cartas, poesías, símbolos religiosos, dibujos, velas o flores. Es una forma de denuncia de lo ocurrido y de mostrar apoyo a las víctimas. Aquí podemos contemplar una selección de esas piezas de nuestro particular “archivo del duelo”. Proceden de dos atentados: el del 11 de marzo de 2004 en Madrid y el del 17 de agosto de 2017 en Barcelona. Todos respondían a un mismo dolor.

Entre los objetos, hay un peluche que sostiene un mensaje dirigido a Patricia Rzaca, el bebé de siete meses que murió con su padre en la explosión de la estación de El Pozo. El matrimonio, de origen polaco, tenía pensado regresar a su país pocos meses después. Patricia fue la víctima de menor edad del 11-M.